Un tercio de los casos de uveítis está relacionado con alguna enfermedad reumática

Archivo - Uveitis, ojos rojos, dolor de ojos - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / BOUILLANTE - ARCHIVO

MADRID 10 Feb. (EUROPA PRESS) -

Un tercio de los casos de uveítis está directamente relacionado con alguna enfermedad reumática autoinmune o inflamatoria, como las espondiloartritis, la artritis idiopática juvenil, la artritis psoriásica, la enfermedad de Behçet, la sarcoidosis, la artritis reumatoide, el lupus eritematoso sistémico, el síndrome de Sjögren, la crioglobulinemia y vasculitis ANCA, tal y como ha señalado la reumatóloga del Hospital Universitario de Donostia Olga Maiz.

"La úvea es particularmente susceptible a este tipo de inflamación debido a su alta vascularización y su papel en la regulación inmune ocular. Además, existen varias similitudes entre el ojo y la membrana sinovial: un ambiente estéril e inmunológicamente privilegiado. Asimismo, ambos tienen líquido en su interior con citoquinas que autorregulan o perpetúan la inflamación y se controlan con los mismos tratamientos inmunomoduladores o inmunosupresores", ha afirmado Maiz.

Sin embargo, esta patología, que se caracteriza por la inflamación dentro del ojo, puede estar causada también por factores infecciosos, oftalmológicos, endocrinos, farmacológicos o idiopáticos, tal y como ha señalado en el marco del V Curso SER (Sociedad Española de Reumatología) de Patología Ocular Inflamatoria, organizado en colaboración con la biofarmacéutica UCB.

La especialista también ha explicado que el seguimiento de los pacientes se debe realizar de forma individualizada, pues algunos subtipos dependen del control de la actividad y del tratamiento recibido.

"En concreto, algunas enfermedades requieren realizar un cribado de uveítis en todos los casos como en la artritis idiopática juvenil, la enfermedad de Behçet y la sarcoidosis. En cambio, las uveítis anteriores agudas asociadas a espondiloartropatías, al ser agudas, no requieren seguimiento regular a no ser que requieran tratamiento sistémico", ha añadido.

TRATAMIENTO EN UNIDADES MULTIDISCIPLINARES

El tratamiento también debe realizarse en una unidad multidisciplinar, de forma que el diagnóstico y el tratamiento sean adecuados, y es que los pacientes deben "saber identificar" los síntomas de brote inflamatorio para consultar "de urgencia" e iniciar "lo antes posible" el tratamiento.

"El tiempo es muy importante en la inflamación ocular por el riesgo de que ocasione una pérdida visual permanente si no se controla precozmente. Cabe recordar que se estima que las uveítis se asocian al 35 por ciento de casos de pérdida visual. En este sentido, los síntomas de alarma son: pérdida de agudeza visual, visión borrosa, visión de moscas volantes, dolor, enrojecimiento ocular y fotosensibilidad (dolor a la explosión de la luz)", ha agregado Maiz.

Por su parte, la presidenta de la Asociación de Uveítis (AUVEA), Virginia Nistal, ha insistido en que "las unidades multidisciplinares no deberían ser un lujo o una cuestión de suerte para los pacientes, sino una necesidad", y es que la uveítis "no entiende de especialidades médicas aisladas", razón por la que su abordaje requiere de "una estrecha coordinación entre profesionales que trabajen de manera conjunta".

"Sin esta coordinación, los pacientes se ven obligados a recorrer un laberinto de consultas sin una estrategia clara, lo que retrasa el tratamiento y compromete su pronóstico visual", ha manifestado Nistal, quien también ha destacado que este enfoque integral, así como un tratamiento adecuado y un diagnóstico temprano, pueden "marcar la diferencia" entre conservar o perder la visión.

NOVEDADES EN TRATAMIENTOS

Durante el curso, los especialistas también han hablado sobre las principales novedades de los últimos años en el ámbito de la inflamación ocular, destacando las 'Recomendaciones de la SER sobre el tratamiento del síndrome de Behçet refractario y sobre la uveítis' o los datos preliminares obtenidos sobre nuevas dianas terapéuticas, que han permitido un "gran avance" en la investigación de terapias dirigidas, además del progreso logrado en técnicas de imagen de fondo de ojo, que han facilitado el diagnóstico y el manejo.

"En todos los apartados se ha ofrecido la visión del especialista en Oftalmología y en Reumatología terminando con un caso clínico práctico como ejemplo del tema expuesto. Este año como clase magistral se ha hablado de los avances en la inmunopatología de las uveítis", ha precisado el doctor Raúl Veroz, reumatólogo del Hospital de Mérida y también coordinador de esta iniciativa.

Por último, ha resaltado que esta actividad es "fundamental" para que los especialistas que no disponen de unidad de inflamación ocular puedan identificar los pacientes que deben ser derivados a la unidad, o animarse a tratar a pacientes en sus centros con el oftalmólogo de referencia.