La variabilidad en cuándo y cómo se dividen las células promueve un desarrollo saludable en los embriones

Archivo - Feto, embrión - NATURE - ARCHIVO

MADRID 14 Oct. (EUROPA PRESS) -

Existe variabilidad en el momento y la forma en que las células se dividen durante el desarrollo de los embriones. Si bien los investigadores creían tradicionalmente que esta variabilidad era un obstáculo que debía regularse, una nueva investigación ha descubierto ahora que, en realidad, promueve un desarrollo saludable. Los resultados, publicados en 'Science' alientan a otros científicos a ver el potencial de la variabilidad y podrían tener un impacto significativo en la tecnología de reproducción asistida.

El autor es Takashi Hiiragi, líder de grupo en el Instituto Hubrecht, un instituto de investigación de la Real Academia de las Artes y las Ciencias de los Países Bajos. Su grupo de investigación tiene como objetivo comprender qué define a los sistemas vivos multicelulares.

"Hemos descubierto que la aleatoriedad en el momento y la forma en que se dividen las células ayuda a que los embriones se desarrollen adecuadamente", expone Dimitri Fabrèges, investigador postdoctoral del grupo Hiiragi. Él y sus colegas estudiaron embriones de ratones, conejos y monos y se sorprendieron con lo que descubrieron. "Aunque el momento de la división celular fue aleatorio, los embriones formaron estructuras organizadas y funcionales", informa Fabrèges.

Cada vez que las células se dividen y forman nuevas células, crece un embrión. En consecuencia, todas las células tienen que reorganizarse en el embrión en crecimiento para formar una estructura organizada. El grupo de Hiiragi utilizó los llamados morfomas para rastrear cómo se organizan las células en el espacio durante el desarrollo. Además, analizaron cómo las células interactúan físicamente entre sí para formar una estructura conectada, también llamada topología, y rastrearon cómo cambia con el tiempo y da forma al embrión.

Los investigadores descubrieron que una mayor variabilidad en la división celular conduce a una distribución más óptima de las células dentro del embrión, lo que promueve un desarrollo saludable. "Nuestro trabajo sugiere que la variabilidad en el momento y el modo en que las células se dividen y en cómo interactúan entre sí no solo se tolera en el embrión en desarrollo, sino que en realidad desempeña un papel funcional en la promoción de un desarrollo robusto", explica Fabrèges.

Estos resultados dibujan un panorama radicalmente diferente al que se creía tradicionalmente. "El papel de la variabilidad en el desarrollo embrionario se pasa por alto en nuestro campo de investigación. Pero ahora, demostramos que en realidad impulsa un desarrollo tisular más preciso y robusto", indica Fabrèges. Él y sus colegas esperan que su estudio anime a otros científicos a ver el potencial de la variabilidad. "Incluso es posible que la variabilidad y la topología sean predictores precisos del bienestar de un embrión, lo que podría tener un impacto significativo en la tecnología de reproducción asistida", concluye.