MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio publicado en la revista 'The Lancet' estima que la infección respiratoria inferior aguda atribuible al virus respiratorio sincitial (VRS) fue responsable de más de 100.000 muertes en niños menores de cinco años en todo el mundo en 2019.
El estudio es el primero en examinar la carga de la enfermedad por el VRS en rangos de edad estrechos, informando que hubo más de 45.000 muertes en bebés menores de seis meses en 2019, y que uno de cada cinco de los casos mundiales totales de VRS se produjo en este grupo de edad.
"El VRS es la causa predominante de infección respiratoria inferior aguda en los niños pequeños y nuestras estimaciones actualizadas revelan que los niños de seis meses y menores son particularmente vulnerables, especialmente con el aumento de los casos a medida que las restricciones de COVID-19 se alivian en todo el mundo y la mayoría de los niños pequeños nacidos en los últimos 2 años nunca han estado expuestos al VRS (y, por lo tanto, no tienen inmunidad contra este virus)", explica Harish Nair, coautor del artículo, de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido).
"Con numerosos candidatos a vacunas contra el VRS en preparación, nuestras estimaciones por rangos de edad más estrechos ayudan a identificar los grupos a los que hay que dar prioridad, incluidas las embarazadas, para poder proteger a los niños de los grupos de edad más jóvenes, de forma similar a las estrategias actuales que ofrecen vacunas contra la tos ferina, la fiebre tifoidea y el tétanos a las embarazadas", añade.
Las conclusiones de este nuevo estudio coinciden en líneas generales con las estimaciones anteriores de un estudio de 2015, que situaba el número de casos anuales de VRS en niños de hasta cinco años en 33,1 millones, lo que daba lugar a un total de 118.200 muertes globales.
Sin embargo, estos cálculos actualizados de la mortalidad por VRS a nivel mundial, regional y nacional para el año 2019 incluyen datos de modelización de más de un centenar de nuevos estudios, lo que permite a los investigadores proporcionar estimaciones para grupos de edad más estrechos -incluyendo de 28 días a seis meses de edad, que se sabe que es el rango de edad con la mayor tasa de mortalidad por VRS- y las tasas de mortalidad en la comunidad (es decir, las muertes que no ocurrieron en un hospital).
En todo el mundo, en 2019, se produjeron 33 millones de episodios de infecciones respiratorias agudas bajas asociadas al VRS en niños menores de cinco años, lo que provocó 3,6 millones de ingresos hospitalarios, 26.300 muertes intrahospitalarias y 101.400 muertes atribuibles al VRS en general (incluidas las muertes en la comunidad). Esto supone una de cada 50, o el 2% de las muertes anuales por cualquier causa en este rango de edad.
Entre los niños menores de seis meses hubo 6,6 millones de episodios de infecciones respiratorias agudas bajas asociadas al VRS en todo el mundo en 2019. Hubo 1,4 millones de ingresos hospitalarios, 13.300 muertes hospitalarias y 45.700 muertes globales atribuibles al VRS en este rango de edad, lo que representa uno de cada 50, o el 2,1% de las muertes anuales por cualquier causa.
Según las estimaciones de las tasas de mortalidad intrahospitalaria frente a las globales por VRS, en todo el mundo sólo el 26%, o aproximadamente una de cada cuatro muertes asociadas al VRS, se producen en un hospital.
Esto es especialmente evidente en los países de ingresos bajos y medios, donde la relación entre casos y muertes hospitalarias en niños menores de cinco años es del 1,4%, en comparación con el 0,1% en los países de ingresos altos, resalta el informe. En general, el 97% de las muertes por VRS en niños menores de cinco años se produjeron en países de ingresos bajos y medios.
"Nuestro estudio estima que tres cuartas partes de las muertes por VRS se producen fuera del ámbito hospitalario. Esta diferencia es aún mayor en los países de ingresos bajos y medios, especialmente en los niños menores de seis meses, donde más del 80% de las muertes se producen en la comunidad", afirma Xin Wang, coautor del estudio, de la Universidad de Medicina de Nanjing (China) y de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido).
"Esto refleja el hecho de que el acceso y la disponibilidad de la atención hospitalaria siguen siendo limitados en estas regiones --alerta--. La identificación temprana de los casos en la comunidad y la derivación para el ingreso hospitalario de los niños enfermos (en particular los que presentan una baja saturación de oxígeno en la sangre periférica), así como los programas de inmunización universales eficaces y asequibles, serán vitales en el futuro".
En un comentario vinculado, Tina Hartert, de la Facultad de Medicina de Vanderbilt (Estados Unidos), que no participó en la investigación, advierte de que "no se puede subestimar la influencia de estos datos. En los países de ingresos bajos y medios existe una carga considerable de infecciones respiratorias agudas durante el periodo neonatal, lo que pone de manifiesto el potencial de las estrategias de inmunización pasiva para influir de forma significativa en la salud infantil...".
Según apunta, "los responsables políticos compararán los beneficios de la prevención del VRS con otras intervenciones prioritarias de salud pública. Las estimaciones precisas del impacto de la prevención son fundamentales para demostrar la conveniencia de invertir en la prevención del VRS", concluye.