MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) - Los ciervos rojos pueden volverse menos sociables a medida que envejecen para reducir el riesgo de contraer enfermedades, mientras que los gorriones domésticos más viejos parecen tener menos interacciones sociales a medida que sus compañeros mueren, según una nueva investigación que muestra que los humanos no sonlos únicos animales que cambian el comportamiento social a medida que envejecen. Estas son algunas conclusiones de una publicación de una colección de 16 estudios, incluidos seis de la Universidad de Leeds (Reino Unido), como parte de un número especial de 'Philosophical Transactions of the Royal Society', que investiga el envejecimiento y la sociedad en el mundo natural .